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Entrega 4: Contenidos para la formulación de un proyecto de Centro Cultural



Hemos llegado al final de este especial, un camino lleno de conocimientos en donde aprendimos conceptos importantes relacionados al Centro Cultural, sus componentes, funciones y una estructura de modelo de gestión para implementarlo en cualquiera de los escenarios posibles de desarrollo, incluso desde lo comunitario, como un mecanismo de organización y cohesión social para el crecimiento sus habitantes. Si no has tenido la oportunidad de leer las entregas anteriores aquí te comparto los enlaces para que tengas toda la información de esta entrega especial:


En esta última entrega describiremos cada uno de los pasos que para mi criterio debe contener un proyecto destinado a la creación de un Centro Cultural, aplicando la información que vimos en las entregas anteriores y dando forma a una línea de proyecto que puede ser utilizada como referencia para el desarrollo de un proyecto real de Centro Cultural desde lo público, privado o desde lo comunitario. ¡Sin más, iniciamos!



Fase 1. Investigación


1.1 Antecedentes del problema

Explica aspectos importantes del contexto en donde se desarrollará el proyecto y detalla las consideraciones que dan lugar a esa problemática o necesidad que se quiere solventar con el proyecto.



1.2 Planteamiento del problema

El planteamiento del problema es la parte de una tesis, trabajo o proyecto de investigación en la cual se expone el asunto o cuestión que se tiene como objeto aclarar.

Desde el punto de vista de la metodología científica, el planteamiento del problema es la base de todo estudio o proyecto de investigación, pues en él se define, afina y estructura de manera formal la idea que mueve la investigación.

Pero, ¿Cómo sabemos que estamos ante un problema apto para un trabajo de investigación? Pues, principalmente cuando encontramos que no existe respuesta en el corpus de investigaciones científicas para explicar ese hecho o fenómeno específico.

Para la formulación del problema, debemos ir de lo general a lo particular, pues se parte de una interrogante que engloba un problema que luego irá siendo abordado por partes.

En términos metodológicos, el planteamiento del problema, que suele ser también el primer capítulo de una tesis, pretende responder la pregunta fundamental de “¿qué investigar?” De modo que el planteamiento del problema es lo que determina, orienta y justifica el desarrollo del proceso de investigación.


La elaboración del planteamiento del problema, como tal, requiere varias fases: identificación, valoración, formulación, definición y delimitación del problema. A continuación, te lo explicación paso a paso.

  1. Identificación del problema: implica el descubrimiento del tema o cuestión que se pretende abordar.

  2. Valoración del problema: consiste en la evaluación de la pertinencia, importancia o relevancia del problema identificado.

  3. Formulación del problema: supone la elaboración del problema en forma de pregunta. Por ejemplo: "¿Cómo afecta la emisión de gases de efecto invernadero el calentamiento global?"

  4. Definición del problema: es la revisión de los antecedentes del tema, las teorías o corrientes dentro de las cuales se encuentra el tema, etc.

  5. Delimitación del problema: supone la precisión y delimitación de los aspectos concretos del tema que serán abordados.

Del planteamiento del problema y su delimitación, a su vez, surge el conjunto de objetivos (generales y específicos) que se persigue alcanzar.



1.3 Justificación del proyecto

La justificación del proyecto comprende la presentación de las razones y motivos por los cuales un proyecto debe ser llevado a cabo. Es decir, las razones por las que vale la pena hacer la investigación en primer lugar. Se podría decir también que es la manera de interesar al lector en los posibles resultados del trabajo y la significación o importancia del mismo.


La justificación es una parte importante de los anteproyectos cuando existe la posibilidad de acceder a un financiamiento del proyecto. De ahí que pueda decirse que, de cierta manera, con la justificación del proyecto se está promocionando o vendiendo el impacto potencial del proyecto. Por lo tanto, la justificación debe necesariamente responder a posibilidades reales y con fundamento.

Argumentos de la justificación de un proyecto

En la justificación de un proyecto nos podemos valer de una serie de argumentos que apoyen, sumen interés o den relevancia a la investigación que nos proponemos hacer. A continuación, algunos de los mejores argumentos para escribir la justificación de un proyecto:

  • Avance en el conocimiento: En este sentido, podemos argumentar que con nuestro proyecto estamos creando un nuevo conocimiento o haciendo una revisión o corrección de un conocimiento establecido. Por ejemplo: la evidencia de un necesario desarrollo de nueva infraestructura cultural.

  • Contribución a la solución de un problema práctico: El proyecto puede estar motivado para dar solución a un problema práctico. Por ejemplo: el diseño de un plan de proyección para las ofertas artísticas locales, para evitar la migración de los artistas y sus trabajos.

  • Demostración del uso novedoso de una técnica o procedimiento: un proyecto puede surgir como la aplicación de un método o procedimiento con fines distintos a los que lo originaron. Por ejemplo: un programa para grabar las historias de los mayores de una comunidad, con el fin de identificar dentro de las grabaciones aspectos histórico - culturales para la construcción de un inventario cultural local.

  • Contribución parcial a una investigación de mayor alcance: a veces, el enfoque de un proyecto abarca apenas una parte de un proyecto de mayor dimensión. Por ejemplo: El mapeo de los artistas y cultores de una localidad contribuye a la identificación de la oferta cultural existente para el desarrollo de una maya programática de actividades durante un año.

Preguntas a considerar en la justificación de un proyecto

  • ¿Cuáles son los beneficios que este trabajo aportará y por qué?

Los beneficios pueden ser tanto materiales como inmateriales. Un nuevo producto, una nueva técnica o un edificio mejor acondicionado, podrían ser considerados beneficios materiales.

Por otro lado, la preservación de una manifestación cultural gracias a un proyecto de investigación, o el mejor rendimiento de la proyección artística debido al uso de nuevas tecnologías son beneficios inmateriales.

  • ¿Quienes serán los beneficiados y por qué?

Siempre será valioso resaltar en una justificación quiénes son los que podrán sacar provecho de nuestro proyecto. Estos pueden ser de distinta índole, por ejemplo, los habitantes de una ciudad, los estudiantes de la escuela de la localidad, etc.

Debemos tener en cuenta las posibilidades reales de beneficio. Así, un proyecto sobre un modelo de crecimiento económico en un 100% de los artesanos de la cerámica en dos meses, es casi una tarea imposible. En cambio, el diseño de un modelo para el apoyo y el acompañamiento de los artesanos de la cerámica para potenciar sus ingresos es claramente más razonable.

  • ¿Cuál es su utilidad?

Esta se complementa con la pregunta: ¿para qué sirve este proyecto? Por ejemplo: del proceso tradicional para la confección de canastas de palma, se puede obtener información de cuáles son los componentes involucrados. Sabiendo esto, los componentes pueden ser identificados y producidos de forma consciente para garantizar su abastecimiento con el fin de asegurar la continuación de esta práctica tradicional.

  • ¿Por qué es significativo el proyecto?

La justificación es también la forma de explicar la importancia del proyecto que queremos llevar a cabo. El proyecto puede tener importancia a diferentes niveles, dependiendo del área a que esté ligada. Por ejemplo: una investigación sobre el tamaño de las partículas subatómicas será importante para el área de física cuántica, no así para los estudios literarios.


También podemos detallar la justificación con apartados mas específicos como por ejemplo: una justificación social, histórica, jurídica, económica, legal, etc.



1.4 Contexto social o consideraciones demográficas

Características propias de la comunidad y su habitantes. Es el conjunto de circunstancias que enmarcan una situación que afecta a uno o varios individuos. Para el desarrollo de un proyecto es importante considerar:

  • Población: cantidad de habitantes, tasa de crecimiento, densidad poblacional, pertenencia étnica, población por sexo, área urbana y periurbana, distribución etaria.

  • Actividades económicas: nivel de producción primaria y secundaria, cadenas de producción y distribución, principales actividades, nivel de formalidad, capacidad productiva y porcentaje de profesionalización.

  • Necesidades sociales: identificación de la distribución poblacional y sus necesidades, reconocimiento de capacidades locales, insumos, áreas que necesitan asistencia y ser trabajadas, condición social en relación al desarrollo cultural y artístico, a la educación y al reconocimiento de los elementos culturales propios.

  • Delimitación temporal: tiempo de desarrollo del proyecto en términos funcionales para su población. Por ejemplo: El proyecto estará dirigido a la población de San Juan de Tibás, comunidad que ha tenido un crecimiento poblacional de 28%6 , por lo tanto, el Centro Cultural se proyectará a una población de 53,142 habitantes aproximadamente, para que este se dé a vasto a un tiempo de 20 años.

  • Contexto Geográfico: datos generales del territorio, ubicación en el mapa, delimitación geográfica, extensión territorial, regiones, o distritos, aspectos topográficos, orográficos e hidrográficos, delimitación poblacional, población beneficiaria, terreno a utilizar, reglamentación y sistemas constructivos.


1.5 Objetivo General

El objetivo general de un proyecto, una investigación o una organización, es la meta principal y global del mismo, es decir, su cometido último. Le da sentido al conjunto, el cual sólo puede alcanzarse una vez completados también los objetivos particulares o específicos. Usualmente, los objetivos generales de un proyecto son los que le confieren su propósito: ya se trate de una empresa, de una organización sin fines de lucro, de una investigación monográfica o de otra naturaleza, siempre estaremos hablando de su meta central. El objetivo general deberá diferenciarse claramente de los particulares siempre. En muchos casos tendrá semejanzas con la misión y visión de una empresa u organización.


Características del objetivo general

Los objetivos generales suelen ser sucintos, concretos y resumibles en una única oración, si bien la misma puede ser tan extensa como se desee. A la hora de redactar un objetivo general, se debe partir de una perspectiva global del proyecto, intentando responder a las preguntas del ¿qué? o ¿qué cosa?, ¿con que fin? y ¿para que? se aspira conseguir con el proyecto. Una vez determinado, se deberá redactar siempre comenzando con un verbo en infinitivo (terminados en “-ar”, “-er” o “-ir”), y de manera tal que abarque el conjunto de los objetivos específicos.



1.6 Objetivos específicos

Los objetivos específicos o auxiliares son aquellas metas concretas y medibles que la empresa espera alcanzar en un plazo determinado de tiempo y siempre bajo las directrices de los objetivos generales. Responden a interrogantes como ¿Qué quiero hacer? ¿Qué es lo que busco? ¿A dónde quiero llegar? ¿Qué necesito hacer? ¿Cómo lo voy a hacer?, que permiten determinar los límites y la amplitud del estudio o proyecto y además orientan sobre los resultados eventuales a obtener estableciendo etapas en el proceso.


Los objetivos deben ser precisos, evaluables y viables, deben estructurase con verbos en infinitivo que se alcancen verificar, evaluar y refutar en determinado momento. Para iniciar su planteamiento, es necesario tener definido el o los problemas, el campo a estudiar, el objeto de estudio, el tema, y en un proyecto o empresa los alcances a obtener. A continuación comparto algunas clasificaciones de verbos a utilizar en los objetivos generales y específicos:



En siguiente recuadro veremos la función de los objetivos según su taxonomía:


1.7 Resultados

Los resultados de proyectos son los productos tangibles generados. Sin los resultados, los proyectos se vuelven inútiles; los resultados son el motivo por el que se crean los proyectos. Sin embargo, existen muchos tipos de resultados de proyectos que son planeados por los inversionistas. Se pueden definir con las siguientes consideraciones:

  1. Los resultados esperados deben expresarse en logros terminados, en términos de cantidad, calidad y tiempo.

  2. Para cada objetivo específico se definen los resultados concretos esperados (uno o más de uno).

  3. Se deben especificar los resultados esperados en el orden y en el período de tiempo en el cual se pretenden alcanzar.


1.8 Metodología

La metodología de un proyecto consiste en todos los pasos que se recogen a la hora de la planificación y gestión de un proyecto. Esta suele recoger desde la gestión de recursos hasta la coordinación del equipo de trabajo, o incluso la relación con todos los interesados en los resultados del proyecto.

Pese a existir muchos tipos de metodología de un proyecto. Se pueden concretar cinco pasos para establecer una metodología:

  1. Mapear lo que funciona ya en términos de prácticas, procedimientos, métodos y procesos.

  2. Hacer un benchmark de cómo se gestionan los tipos de proyectos y actividades que lleva a cabo tu organización. Siempre habrá estándares y métodos prácticos particulares para sectores de la industria.

  3. Definir los procesos que supondrán mejoras en la práctica de gestión de proyectos en tu organización. Esos procesos pueden estandarizarse para todos los proyectos mediante reglas, plantillas y procedimientos. El establecimiento de medidas que reflejen si se están implementando o no los procesos, y ligándose o no a recompensas, juega un papel principal en el cambio cultural hacia una organización orientada a proyectos.

  4. Documentar todos los procesos y sus componentes: plantillas, procedimientos, La compilación resultante de principios, procesos y herramientas puedes denominarla tu metodología.

  5. Reevaluar y refinar un proceso iterativo. Los componentes de la metodología serán revisados de forma periódica, actualizados y cambiados cuando sea necesario. Esta es una evolución continua, según la organización madura en la práctica de la gestión de proyectos. Una metodología no debería ser estática. Cualquier metodología debería verse como un conjunto de documentos, describiendo un conjunto vivo de procesos. Una de las funciones principales de la oficina de proyectos es capturar lecciones aprendidas y sugerencias para mejorar los procesos de gestión de proyectos de los profesionales que dirigen dichos proyectos y así mejorar de forma continua la metodología.


1.9 Marco teórico

El marco teórico es la recopilación de antecedentes, investigaciones previas y consideraciones teóricas en las que se sustenta un proyecto, una investigación, análisis, hipótesis o experimento. El marco teórico, también llamado marco de referencia, es el soporte teórico, contextual o legal de los conceptos que se utilizaron para el planteamiento del problema.

Con esta recopilación de información, también se intenta demostrar cuál es el aporte novedoso que el proyecto va a hacer en la comunidad.

Estructura del marco teórico

Las partes de un marco teórico pueden variar dependiendo del tipo de proyecto, pero, en términos generales, debería estar estructurada en las siguientes secciones básicas.

  • Antecedentes: Es la parte en la que se menciona el problema y todos los estudios previos que se han hecho al respecto. De esta forma, se pueden comprender mejor los abordajes anteriores y establecer una guía con respecto a la información y procedimientos disponibles para llevar a cabo el proyecto. A su vez, los antecedentes incluyen información adicional que permita comprender mejor el problema en el presente, como, por ejemplo: contexto geográfico, cultural, económico, demográfico, histórico, político, social, entre otros que sean pertinentes a los fines del proyecto.

  • Bases teóricas: Como indica su nombre, se refiere a toda la teoría que sustenta el tema o problema planteado. Si se tratara de un asunto del que aún no existe al menos una teoría previa, entonces esta es la parte en la que se expondrá una teoría propia. En las bases teóricas también se describen conceptos clave sobre el problema que se abordará de manera que sea posible dilucidar mejor el asunto tratado.

  • Bases legales: En algunos casos, es necesario aclarar todos los parámetros legales sobre los cuales se va el proyecto. Eso debe describirse en las bases legales que, a su vez, deben estar dentro del marco teórico. Del mismo modo, en las bases legales deben ser explicados todos los antecedentes de esta índole que existen sobre la problemática y el proyecto en sí, en caso de que apliquen.

  • Variables: En el marco teórico se deben expresar todas las variables del problema en términos de factores medibles. De esta manera, se evitan confusiones o interpretaciones erradas con conceptos que podrían ser ambiguos.

¿Cómo hacer un marco teórico?

No existe una fórmula única para hacer un marco teórico. Sin embargo, hay algunas pautas que podrían tenerse en cuenta al momento de su redacción:

  1. Revisar la bibliografía: la bibliografía debe ser revisada previamente y de manera exhaustiva para poder seleccionar solo aquello que sea de interés al proyecto.

  2. Identificar las bases legales: las bases legales (si aplican) deben estar ordenadas cronológicamente, mencionando primero las más antiguas.

  3. Ordenar los conceptos: los conceptos deben estar organizados jerárquicamente y de manera lógica. Se trata de un aspecto que le dará más formalidad al proyecto y, además, hará que su comprensión sea mucho más fácil.

  4. Evitar información de relleno: concentrarse exclusivamente en datos que contribuyan a generar conocimiento.

  5. Redactar de manera clara: la redacción debe ser clara, concisa, concreta. Los conceptos y métodos descritos no deberían dejar lugar a interpretaciones erróneas.

  6. Diferenciar las partes: un marco teórico no se divide en capítulos. En su lugar, cada una de las partes que lo componen (antecedentes, bases teóricas y legales, variables) debe estar separada con el título respectivo.


1.10 Marco Legal